pensé en seguir, sin imaginar encontrarte. yo buscaba algún rumbo. sonreía, mientras sigiloso el amor se alojaba en mí sin contratos de locación y sin posibilidad de desalojo...
“Pido” decimos en los juegos cuando estamos muy cansados, pero queremos seguir jugando. “Pido” es un recreo dentro del recreo… Claro que hay quienes abusan del “pido” y lo dicen justo antes de perder. ¿Vale hacer eso? Y también hay otras veces en que pedimos “pido” porque queremos tomarnos un descanso de una pelea, una obligación desagradable, algo feo que nos pasa. Cuándo nos da ganas... ¿Qué hacemos después del “pido”?